Talleres de género en Paysandú
La violencia basada en género y generaciones es una de las principales causas de separación familiar.
Además de vulnerar el derecho de niños, niñas y adolescentes a crecer en entornos seguros y protectores, afecta gravemente su desarrollo y pone en peligro su integridad física y emocional.
En 2014, Aldeas Infantiles SOS creó la Política de Equidad de Género con el objetivo de reforzar esta perspectiva en los servicios brindados por la organización a nivel mundial. De los 135 países que integran la federación, Malawi, Kenia, Vietnam y Uruguay fueron los elegidos para la implementación de planes piloto de la política.
A partir de evaluaciones realizadas en el programa Salto, Aldeas Infantiles SOS Uruguay creó un plan nacional, que contemplaba la implementación de talleres de capacitación y sensibilización y la adaptación de la Política para ser trabajada con los equipos de gestión y de atención directa.
En este marco, durante 2016 se realizó una capacitación con la Asociación Civil El Paso y talleres de sensibilización en género y sexualidad en el Programa Salto, que incluyó a adolescentes participantes del servicio de Acogimiento y a referentes de cuidado.
Un año después se editó Iguales pero diferentes. Marco de trabajo para la igualdad de género, un documento basado en la Política de Equidad de Género que pretende realizar un análisis crítico de las estructuras y relaciones organizacionales.
Los principios a los que apunta este documento son: prevenir todo tipo de violencia contra niños, niñas y mujeres; poner énfasis en la igualdad de oportunidades en todos nuestros programas para que niños y niñas accedan a todos los niveles de una educación de calidad formal y no formal; sensibilizar a los/as niños, niñas, cuidadores y cuidadoras sobre temas de salud sexual y reproductiva y promover la atención médica materna de las mujeres; abordar las barreras de género con el empoderamiento económico de las familias de origen y desarrollar las capacidades que promuevan la igualdad de género en la organización.
También propone un glosario de términos vinculados a género y sexualidad y una guía de recursos para los equipos de atención directa y de las referentes de cuidado.
Durante este año se realizaron talleres de implementación del marco de trabajo con técnicos/as en el Programa Paysandú. En estas instancias se tomó como punto de partida lo vivencial, especialmente los mensajes que los/as habían marcado en su niñez y adolescencia.
Cecilia Menoni, coordinadora nacional de Protección Infantil, comenta que a partir de estas consignas surgieron diversos testimonios vinculados a mandatos de género impuestos por la escuela o la familia: “Muchos hombres contaron experiencias desde su educación emocional, el no llorar, el ‘ser hombre’; algunas mujeres comentaron que había cosas que no les dejaban hacer porque eran ‘cosas de varón’”.
“El objetivo es que los programas integren este marco de trabajo a sus planes operativos anuales. Si bien se pueden hacer actividades puntuales, lo central es cómo miramos esto desde una perspectiva más amplia, más general, en el trabajo con los niños, niñas y adolescentes”, agrega.
Durante 2018 se proyecta replicar estas experiencias en todos los programas de la organización, como forma de reforzar el enfoque de género en las prácticas que ya se están implementando en cada servicio.
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