Seminario Crecer sin Violencia
Con la participación de más de 300 personas, el martes 23 y el miércoles 24 de julio se desarrolló el seminario Crecer sin Violencia, organizado por Aldeas Infantiles SOS Uruguay.

El encuentro, que se realizó en la sala Ernesto de los Campos de la Intendencia de Montevideo, contó con exposiciones de especialistas nacionales e internacionales vinculadas a las diversas aristas que involucran a la protección infantil y al derecho de niños, niñas y adolescentes a vivir en entornos seguros y protectores.
También se presentaron audiovisuales para niños, niñas y adolescentes generados por Aldeas Infantiles SOS Uruguay y el Centro Latinoamericano de Economía Humana sobre abuso emocional, sexual y físico.
Protección infantil y entornos seguros y protectores
La mesa de apertura estuvo a cargo de la directora nacional de Aldeas Infantiles, Anainés Zignago, y de la presidenta de INAU, Marisa Lindner, quienes rescataron la relevancia de estos encuentros.
“Sentarnos y cuestionarnos es algo que como organización y como sociedad tenemos que hacer más seguido. En parte es lo que estamos haciendo hoy acá”, afirmó Zignago. También declaró que cuando surgen situaciones de desprotección es porque “hay muchas cosas que pasaron mal en el camino. Vivimos en una sociedad que tiene prácticas que son violentas, una sociedad que valida el maltrato”.
En el marco de la conmemoración de los 30 años de la aprobación de la Convención sobre los Derechos del Niño por las Naciones Unidas, Lindner hizo referencia a cómo este acontecimiento marcó un hito en la concepción que tenemos sobre los/as niños, niñas y adolescentes como sujetos de derecho: “Esto cambió para siempre la relación de lo generacional. Otorgar el derecho a ser persona a los niños y las niñas no es solamente un cambio en lo que implica el concepto de ciudadanía, sino que subvierte la relación del mundo adulto con los niños. Es verdaderamente una revolución en la historia de la humanidad”.
Luego de las palabras de apertura, comenzó la mesa sobre protección infantil.
Lucía Miranda, coordinadora regional de Protección Infantil y Programas para Latinoamérica y el Caribe de Aldeas Infantiles SOS Internacional, destacó el trabajo que realiza la organización en más de 20 países de Latinoamérica y el Caribe. Para Miranda, uno de los aspectos clave para abordar el maltrato y el abuso es “romper tabúes”: “Empezar a hablar el tema del maltrato es sumamente importante para poder prevenirlo. Y aparte de esto contar con los mecanismos necesarios para poder responder ante cualquier incidente de desprotección infantil”.
La coordinadora nacional de Protección Infantil de Aldeas Infantiles SOS Uruguay, Cecilia Menoni, destacó la complejidad que supone que los datos relevados estén concentrados en los sectores más vulnerables: “Al tener la información centralizada y sesgada en las instituciones que intervienen con la infancia y con la infancia en situación de vulnerabilidad, generamos un mecanismo en el que explicamos la violencia a partir de la pobreza. Las lecturas lineales pueden ser bastante complejas. Este es un fenómeno que atraviesa a todas las franjas sociales”.
La conferencia central de la primera jornada estuvo a cargo de la psicóloga y especialista española Pepa Horno, quien ya había colaborado con Aldeas Infantiles en 2017 en la realización de talleres para los equipos y también en la elaboración de materiales y guías sobre entornos seguros y protectores y afectividad consciente.
Horno hizo énfasis en cambiar la mirada acerca de lo que concebimos como “protección”: “Debemos pasar de entender la protección como erradicación de violencia a entenderla como crear un entorno que haga posible el desarrollo pleno de los niños, niñas y adolescentes”.
Para quienes trabajan con niños, niñas y adolescentes, especialmente en el caso de quienes lo hacen dentro del sistema de protección, una de las claves para la creación de entornos seguros es entender a la afectividad “como una obligación profesional”.
Al sistematizar la afectividad, “la llevamos a todas las personas con las que trabajamos y todos los días, la convierto en el aire que genera un entorno de seguridad emocional”. “Te pagan para abrazar. Si no era capaz de abrazar, cámbiate de trabajo”, aseguró la psicóloga española.
Los retos de la interinstitucionalidad, los efectos del trauma y el abordaje de las prácticas abusivas
Uno de los cambios de paradigma fundamentales para pensar a la protección y el cuidado tiene que ver con dejar de percibirlas como tareas que competen exclusivamente a la esfera privada. La responsabilidad compartida entre las familias, el Estado y la sociedad y la necesidad del trabajo en red fueron aspectos destacados por todas las exposiciones.
“En el trayecto de la detección de situaciones de violencia transitamos muchas instituciones por la vida de los niños. Esas instituciones operábamos muchas veces de forma no coordinada, por lo tanto revictimizábamos a los niños más de lo que los protegíamos. La articulación y la estrategia de saber en esa ruta qué es lo que va a hacer cada una de las instituciones es central”, comentó María Elena Mizrahi, coordinadora del Sistema Integral de Protección a la Infancia y a la Adolescencia contra la Violencia (Sipiav), dando inicio a la mesa sobre retos de la interinstitucionalidad en el abordaje de las violencias.
Además, destacó la necesidad de profundizar en el seguimiento de las situaciones, que “siguen siendo un desafío muy grande para todas las instituciones.”
Para Mariela Solari, directora de la Unidad de Víctimas y Testigos de la Fiscalía General de la Nación, la dificultad del seguimiento tiene que ver con que se piensa a la judicialización “como el fin, y en realidad es el inicio de otro proceso. Cuando una situación se judicializa, tengo que poder pensar cómo voy a seguir trabajando con este niño o con esta familia si la resolución no es la resolución que espero”.
También subrayó los avances de las políticas públicas y los sistemas de información que han permitido en los últimos años tener datos de calidad sobre el tema: “Durante mucho tiempo hablamos del maltrato y se intentaron construir políticas públicas sin datos. El enorme esfuerzo que ha hecho el Sipiav por rescatar datos y ponerlos sobre la mesa es lo que nos tiene que ayudar para poder pensar las políticas públicas y revisar los modelos de atención”.
Las prácticas violentas que se ejercen sobre niños, niñas y adolescentes tienen graves consecuencias en su desarrollo. Unen el amor y los límites al maltrato, dañan los vínculos y fomentan el miedo, la impotencia y la angustia, aspectos que abarcaron las especialistas a cargo de la mesa de trauma e infancia.
“La mente de un niño se desarrolla en la interfase de lo que es la materia viva de su cerebro y los vínculos que sus cuidadores establecen con él”, afirmó la psiquiatra Magdalena García Trovero, integrante del Centro de Psicotraumatología y vicepresidenta de EMDR Uruguay.
García Trovero se enfocó en los aspectos biológicos del trauma y señaló que las experiencias traumáticas que se mantienen en el tiempo producen cambios a nivel cerebral, que pueden ser reversibles si se interviene oportunamente. “Para que se pueda llegar a un desarrollo pleno es necesario crecer en ambientes no perfectos, pero en los que predominen las experiencias de buen trato”, agregó.
Denise Defey, psicóloga y coordinadora del Centro de Intervenciones Psicoanalíticas Focalizadas, instó a no perder la dimensión sociopolítica en la que se insertan las situaciones de violencia sobre niños, niñas y adolescentes e invitó a repensar los lugares que adjudicamos a las maternidades y paternidades. Para ello, señaló, es necesario construir narrativas protectoras de estas figuras: “Nada podemos hacer para cuidar a nuestros niños si no cuidamos y dignificamos a sus madres y padres”.
La exposición de cierre del seminario trató sobre prácticas abusivas sexuales entre pares y fue realizada por Nelly Navarro y Salvador Arredondo, integrantes de la ONG chilena Paicabí.
La organización, que comenzó a trabajar en 1996 con niños, niñas y adolescentes víctimas de abuso sexual, define a las prácticas abusivas sexuales como “un modo de vincularse sexualmente insertado en un matriz de violencia social que ha posibilitado que un/a niño, niña o adolescente establezca relaciones abusivas de sujeto objeto ya sea en forma agresiva, explotadora, amenazante o imprevista en contexto que puede ser ‘de juego’”.
Los especialistas señalaron que el 100 % de los/as niños, niñas o adolescentes que cometieron una práctica abusiva sexual habían sido víctimas de alguna forma de maltrato en el pasado y destacan que es necesario abordar el tema desde una responsabilidad compartida entre el/la niño, niña o adolescente, su familia y el contexto.
“Que un niño o niña realice una agresión sexual no es responsabilidad solo de ese niño o de esa niña, sino que hay una matriz de violencia social. Hay una historia de vulneración en su vida para que llegue a incurrir en este tipo de prácticas”, afirmó Navarro.
“¿Quién ha reconocido el dolor en ellos? ¿Quién les ha pedido disculpas a esos niños y niñas? ¿Cómo yo voy a generar un registro de disculpas con el otro o un registro de la dimensión del daño del otro si no ha habido adultos que reconozcan mi propio dolor? Es necesario construir un vínculo terapéutico suficientemente sostenedor y que fuera acompañador del otro, más que juzgador. Nosotros no juzgamos, ni tampoco juzgamos a las familias”, finalizó Arredondo.
El problema de las violencias que afectan a la niñez y la adolescencia representa un desafío para toda la sociedad. En ese sentido, el compromiso de Aldeas Infantiles SOS Uruguay por impulsar este espacio de formación e intercambio es vital para aportar a un contexto país en el que el tema ha adquirido relevancia y visibilidad.
Agradecemos a quienes expusieron y quienes asistieron al seminario, a las colaboradoras y los colaboradores de la organización que lo hicieron posible, a la Intendencia de Montevideo por el alquiler de la sala, a Improfit por el apoyo en la difusión, a Asuntos Públicos por el registro audiovisual y a los medios de comunicación que nos brindaron el espacio para hablar de la importancia de que los/as niños, niñas y adolescentes crezcan en entornos seguros y protectores.
Todas las exposiciones, así como los audiovisuales adaptados para niños, niñas y adolescentes, se encuentran disponibles en nuestro canal Youtube
Foto: Aldeas Infantiles SOS Uruguay